NOTA de OPINIÓN por Rafael Ibañez.
Sin disimulo CFK y sus seguidores se guardan (según ellos la jefa dió la orden), Massa se esconde sin dar señales de vida y Alberto Fernández huirá a España luego de la asunción de Milei.
Mientras, los gobernadores e intendentes derrotados del PJ siguen hablando de su hermosa e incomprendida gestión, no se dan por aludidos en nada.
De paso por San Juan pude observar con asombro la campaña de “mejor gobernador incomprendido” de Uñac y al triple derrotado Baistrocchi como un estadista al cual la gente no supo ver lo maravilloso que era detrás de sus trajes importados y su inocultable arrogancia. Lo debo decir, viven en una galaxia muy lejana. La soberbia y el ego desmedido aún enceguecen sus desastrosas acciones políticas.
Nobleza obliga, lo del giojismo ha sido por demás patético. En vez de aprovechar la enorme oportunidad de renovarse generando una opción con dirigentes jóvenes, mostrando una alternativa diferente y con futuro, prefirió utilizar a los Gioja con una campaña bordeando lo bizarro y decadente; le hicieron más agujeros al ya averiado barco. Algo natural para su mirada mezquina y soberbia, que tuvo un discurso irreal, desprendido de lo que le pasa a las mayorías. Era un relato dirigido a los militantes rosqueros más recalcitrantes, apostando al “cualquier cosa es mejor a que gane Uñac”. Bueno, tampoco habrá más Gioja.
NINGUNO de los nombrados se hace cargo de su responsabilidad y los graves errores políticos y de gestión. Son todos ellos a las vez responsables en distinto grado y condujeron al peronismo a la peor y más humillante derrota.
Esta nota sigue la saga de Fernández y el Frente de Todos, ¿un (des)gobierno traidor que nos castigó a todos? y ¿Cómo es posible que un violento y antiargentino como Milei llegara al balotaje? cuyo eje es el mismo: la necesidad de realizar un verdadera autocrítica, aprender de los errores, desplazar a los mariscales de la derrota y ayudar a dar paso a nuevos dirigentes que levanten las banderas adecuadas, militen convencidos y no esperen el cargo para negociar por un merecimiento que nadie sabe cual es.
Las excusas del desastre nacional y la “ola de cambio” no justifican las derrotas locales. El pueblo castigó y con motivos.
Por supuesto que Uñac, Baistrocchi, Gattoni y tantos otros “peronistas” que perdieron por el país, tratarán de mostrar que ellos hicieron todo bien, pero bueno, culpa de AF y los medios nacionales y esa cosa de que hay mucha gente estúpida que se deja engañar y que no apreciaron sus maravillosas gestiones. Hicieron lo imposible y lo lograron: hundieron varios Titanics.
Si esta tesis del «desastre nacional y la ola de cambio” fuese aplicable a todo, no habría gobernadores peronistas con peores indicadores que San Juan que hubiesen podido ganar. Miren La Rioja o Tucumán.
O por ejemplo, en el caso del balotaje, que hubiese provincias como Santiago del Estero y Formosa con diferenciales escandalosos de casi 70 a 30 a favor de Massa.
Si fuera por los medios nacionales, los municipios gigantes como Lomas de Zamora, que a pesar de Insaurralde ganaron por el 50% la intendencia y crecieron al 68% a favor de Massa en la segunda vuelta.
¿Cuál es la diferencia entonces? ¿Si en esta provincia se está visiblemente mejor y con una gestión aparentemente buena, por qué se perdió tan abismalmente?. La respuesta está en la política.
Esto es, la forma de gestionar en todos los niveles. Incluyendo el funcionamiento de las estructuras partidarias, el tipo de acercamiento y acompañamiento junto a la ciudadanía, cuan disonantes son las narrativas con la realidad, la percepción ciudadana de si hay ostentación, arrogancia, despilfarro y corrupción, el manejo de crisis y demás.
Bueno, en todo eso hicieron agua. Subestimaron al pueblo sanjuanino, se sintieron invencibles, los invadió la soberbia, despreciaron la formación y el trabajo militante y hasta se atrevieron por avaricia tratar de burlar la Constitución para seguir en el poder.
Todo eso se pagó muy caro. Al día de hoy no lo reconocen, no lo reconocerán tampoco.
Perdieron no por problemas financieros o de poca obra pública en la Capital o la Provincia, perdieron porque fueron más PRO que los dirigentes del PRO, y los de JxC fueron más peronistas que los peronistas.
Merecerá este tema una serie de análisis posteriores, no se puede esconder el sol con un dedo. Para todos es muy claro que en San Juan no ganó Orrego, sino que perdió Uñac con sus socios.
Volviendo a la mirada general, duele mucho que en el nombre de una supuesta gobernabilidad hayan llamado desde AF, CFK, Massa hasta Capitanichh y Uñac, a guardarse, a esperar sentados en la tribuna esperando que se destruya todo para volver con un, ¿vieron, les dije?. Es realmente de una miserabilidad supina, no les importa cuán bien o mal nos vaya, solamente quieren su espacio de poder y seguir prendidos de la teta.
Si en esta etapa no nos damos un debate a cielo abierto sin esconder nada, sacando del juego a los culpables de la derrota y fomentando la democracia interna de los partidos y frentes, volverán los mismos de siempre y nuestra arrogante casta seguirá disfrutando tranquila como si nada hubiese pasado.
Si hoy llegamos a esta situación donde un brutal ajuste caerá sobre nosotros, con devaluaciones, recesión con inflación, privatizaciones, sin obra pública y con salarios estatales congelados – presentado como «prórroga del presupuesto 2023 con mismos valores para universidades y demás» – de la mano de los mismos que nos vendieron y endeudaron con Macri, es porque los que se fueron hicieron todo mal: aumentaron pobreza, caída del poder adquisitivo del salario, destruyeron las reservas, elevaron la inflación, no cumplieron ninguna promesa y se enfrascaron en luchas internas por cargos y negocios con un relato que nos quería ocultar la realidad mediante una película de fantasía con frases emotivas y apelando a cierta memoria emocional.
¿Y las mayorías? Bien, gracias. En nombre del “campo nacional y popular” realizaron el mayor daño desde el retorno de la democracia, con una contundente derrota política, ideológica (cultural) y económica. Hoy ya no es más el “peronismo” sinónimo de los “días más felices”.
Que se hagan cargo AF, Massa, CFK, los gobernadores e intendentes del PJ que perdieron, no fueron los ciudadanos o los que votaron a Milei los culpables, fueron ellos.
LAS DECLARACIONES Y OPINIONES EXPRESADAS EN ESTE ARTÍCULO SON DE EXCLUSIVA RESPONSABILIDAD DE SU AUTOR Y NO REPRESENTAN NECESARIAMENTE EL PUNTO DE VISTA DE AHORA SAN JUAN.