Ni bien dieron fechas par a las PASO, Juntos por el Cambio en medio de una interna feroz, tuvo una reunión de sus exponentes nacionales para acordar a una «estrategia de juego» para dirimir las candidaturas. Detalle no menor es que de esta reunión no salió ningún comunicado sobre el manejo y situación de la pandemia.
La puja, la interna y ambiciones de los referentes en Buenos Aires, Ciudad y provincia, es de mucha tensión y va a costar llegar a consensos debido a las peleas entre las facciones, sobre todo en Pro, por los nombres en las listas.
Las únicas coincidencias es que las legislativas serán una batalla clave por el control del Congreso y que la oposición necesita sumar adhesiones a su oferta para tener una propuesta más competitiva. En segundo lugar, acordaron que en aquellas provincias que no se logre un consenso por las listas, los postulantes se definirán a través de las PASO. “Si no hay acuerdo, que haya internas ordenadoras y civilizadas”. La intención es ensanchar la “base de representación” del espacio para enfrentar al oficialismo en las urnas.
El gran ausente fue Mauricio Macri, quien argumentó que tenía un compromiso personal Su faltazo generó coenarios muy duros. En representación de Pro asistieron Larreta, María Eugenia Vidal, Patricia Bullrich y Humberto Schiavoni. Los emisarios de la UCR fueron Alfredo Cornejo, Mario Negri, Luis Naidenoff y Martín Lousteau. Por parte de la fuerza de la CC, la fuerza de Elisa Carrió, estuvieron Maximiliano Ferraro y Juan Manuel López. También participó Miguel Ángel Pichetto, uno de los referentes de Peronismo Republicano.
