Iniciamos El Pasillo de la semana reiterando lo expresado por Naciones Unidas previo a la pandemia en el 2019 en su Plan de Acción contra el Discurso de Odio: “en todo el mundo, estamos presenciando una inquietante oleada de xenofobia, racismo e intolerancia”, agregando que “se están explotando los medios sociales y otras formas de comunicación como plataformas para promover la intolerancia” y aseverando que este discurso “se está convirtiendo en un arma para cosechar ganancias políticas con una retórica incendiaria que estigmatiza y deshumaniza a las minorías, los migrantes, los refugiados, las mujeres y todos aquellos etiquetados como ‘los otros’”.
El covid ha exacerbado este discurso, no solo trajo crisis y catástrofes sanitarias, sino que se aceleró la concentración de riquezas y poder, aumentando la desigualdad en las sociedades y entre las naciones. Las desgracias no vienen solas decían las abuelas. Esto no es ajeno a nuestro San Juan, solo basta dar una ojeada a las publicaciones en redes, escuchar la radio o ver algo de tele para comprobar que estas miserias también nos impactan.
Tuvimos una breve llamada grupal con un par de colegas sobre estos temas, como para abrir el debate nomás.
Un viejo periodista y “Editor”, aún en un medio importante nos decía que “en San Juan tenemos medios de comunicación semi privados, hay dueños, pero se depende en algunos casi por completo de la pauta oficial, que a duras penas alcanza para pagar algunos costos. Pero sin ese ingreso se fundirían muchos. La diferencia se hace con la publicidad tradicional, de negocios, empresas y avisos de personas y eso te lleva a lo siguiente: ¿cómo elegís en qué medio publicitar?. La respuesta es obvia, en el que tenga más llegada a donde te interesa. Entonces ahí se establece una lucha de posicionamiento entre los medios para captar público, y para muchos cualquier cosa vale. No importa qué se publique ni como, lo que importa es el rating o la cantidad de interacciones en redes. Ahí tenés tierra fértil para el morbo, lo luctuoso y el uso exagerado de lo sexual. Los hechos de sangre y un par de desnudos venden más que una nota de cultura, por ejemplo”.
Una periodista, recibida recientemente de “Lic”, ante lo que exponía el “Editor” decía: “bueno eso es el tradicional amarillismo, que ayuda al discurso de odio, pero esto es nuevo . Aquí hay una campaña de odio sistematizada, elaborada, es propaganda política basada en la “anulación del otro” como persona y así eliminar cualquier postura que atente con esta imposición de una agenda política y económica. Es matar al mensajero para desacreditar el mensaje. Por ejemplo, si digo que apoyo el confinamiento por cuestiones sanitarias te acusan de dictadora y esclavista, para que te enojes y respondas con tus emociones y te olvides del tema central: la gravedad de la pandemia y las acciones que hay que tomar”.
El “Editor” le cortó diciendo que “tu postura está muy ideologizada, ustedes a veces ven fantasmas donde no los hay… tampoco exageremos, debates acalorados hubo siempre”.
Nuestra amiga “Lic” saltó de inmediato, “todas las posturas están sustentadas en una posición ideológica, tanto la suya como la mía. Cuando dice “ustedes” suena estigmatizante en su tono, seguramente no lo dijo con mala intención, pero ese es el inicio del discurso que lleva al odio. Entiendo que pensemos distinto, pero si yo reacciono equivocadamente respondería con otro “ustedes” y aquí es donde hay que poner un punto”.
Tratando de bajar tensiones, el “Editor” arremete diciendo “entiendo que no fue feliz mi frase y agradezco tu sinceridad, de alguna manera para mi generación no es fácil deconstruir, como se dice ahora. El uso del lenguaje es muy importante, pero no debemos caer tampoco en una especie de censura o autocensura por temor a incomodar. Es algo que hoy se debate abiertamente en europa por el uso sólo del lenguaje “políticamente correcto” que muchas veces ha servido de excusa para un ‘de eso no se habla’”.
“Lic” no tardó en devolver el guante, “recibida las disculpas, aunque eso de poner en duda lo del discurso “políticamente correcto” es también un recurso de ciertas derechas.. (rie). Quisiera agregar que el extremismo que hoy muestran las derechas en el mundo es impresionante, aquí mismo es increíble. No es esencialmente una cuestión de mercado publicitario o posicionamiento como él dice, es un plan, rentado, bancado por quienes están detrás de los medios más grandes y seguido por todos los medios chicos que como zombies se suman a la “ola” sin darse cuenta que se perjudican a sí mismos por dilapidar credibilidad, además de que envenenan a la sociedad perdiendo cualquier ética profesional. Como todo en la vida, hay una manera correcta de crecer y otra que no lo es”.
La charla siguió, era imposible detenerla, comunicadores hablando, exponiendo y retrucando. Nuestros amigos “Lic” y “Editor” finalmente llegaron a un entendimiento con sus notorias diferencias.
Desde El Pasillo queríamos exponer el tema y abrir debate, no sin dar nuestra opinión. Consideramos que el discurso de odio no puede ampararse detrás la fachada de la libertad de expresión, propiciamos que este medio, y todo los medios sanjuaninos, tomen al menos las siguientes acciones: no divulgar noticias sin verificar su veracidad, eliminar comentarios de odio y bloquear usuarios que los publicaron. Hasta el finde que viene.
