Desde octubre y hasta la entrada en vigencia del Decreto de Necesidad y Urgencia los inquilinos estaban respaldados por la Ley de Alquileres. Desde el 29 de diciembre el mercado inmobiliario quedó practicamente desregulado y las subas rondan el 200% y hay pedidos de pago en dólares (billete) cotizados a precio blue.
La decisión presidencial se dio justo en el mes en el que hay más renovaciones y ahí se vieron aumentos de hasta el 200 por ciento. La normativa derogada implicaba aumentos de hasta el 137,5 por ciento, según el índice ICL (Índice de Contratos de Locación), que hace un promedio de la inflación y los aumentos salariales.
Quienes ofrecen viviendas en alquiler, además de triplicar los precios, también lo hacen con periodos de actualización de tres o cuatro meses como máximo. En algunos casos, inquilinos se encontraron con que les exigían incrementos mes a mes, según el valor del Índice de Precios al Consumidor (IPC) que publica el Indec, lo que significarían aumentos muy fuertes, ya que se esperan subas de precios de hasta el 100 por ciento en los próximos tres meses.
A esto se suma que detectaron ofertas en dólares para poder renovar o actualizar los alquileres.
Desde la Cámara Inmobiliaria de San Juan esperan que el mercado se autoregule en abril.
El DNU que desreguló los contratos de alquileres entró en vigencia, pero siguen los intentos por dejarlo sin validez. Asociaciones de inquilinos de todo el país pidieron que sea declarado inconstitucional.
Las nuevas condiciones de alquiler implican que los contratos podrán ser por menos de dos años, en cualquier moneda y, las actualizaciones, atadas a cualquier índice convenido entre las partes.
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