Desde que inició la pandemia, en marzo del 2020, el 15% de los choferes de líneas urbanas están en licencia por ser parte de la población de riesgo. Menos choferes y la exigencia de más frecuencia es el dilema con el que batallas las empresas de transporte urbano.
“Cuando dejas gente en la parada se arma lío, pero el mayor problema es si dejar varados a los niños, eso no lo podemos permitir” aseguraron desde el sindicato UTA.
La solución parecería ser simple: contratar personal temporal. Desde empresas distintas empresas de transporte expresaron que es imposible. No hay posibilidad de contratar personal porque la demanda del servicio bajo desde el inicio de la pandemia, lo que significa que las ganancias también. Antes de las últimas medidas restrictivas la demanda cayó al 80%, ahora se espera que baje aún más y posicione en el 60%. Estos porcentajes comparándolo con periodos previos a la pandemia.