En el año 2002, el Congreso de la Nación promulgó la Ley N° 25.682, que impuso la adopción del uso del bastón verde en todo el territorio de la República Argentina como instrumento de orientación y movilidad para las personas con baja visión.
La Organización Mundial de la Salud estima que el 11 por ciento de la población padece alguna disminución severa visual. Las patologías más frecuentes que afectan la visión son glaucoma, que se produce cuando no se detecta la presión ocular por lo que no es tratada oportunamente; la retinopatía diabética y la maculopatía relacionada a la edad avanzada. Son personas que ven pero escasamente y de muy variadas formas.
La herramienta fue creada por la profesora de educación especial Perla Mayo como instrumento de orientación y movilidad que identifica a las personas que tienen baja visión. Además de ayudar a los pacientes a circular y ubicarse en el espacio, el color verde es clave para distinguirlos de quienes padecen ceguera y utilizan un bastón blanco.
