Es Santiago Nieto y para la primera participación incluirá la identidad cordillerana.
En Italia, los días 6 y 7 de noviembre debutará la nueva Selección Nacional de Pastelería, Heladería y Chocolatería. Será un equipo de cuatro personas, la mayoría de Buenos Aires, pero que llevarán el sabor y la identidad de San Juan y la Cordillera de los Andes para competir con otros 11 países. Eso será gracias a que el capitán es Santiago Nieto, maestro heladero sanjuanino que ya es un veterano de competencias internacionales. Nieto contó los desafíos que enfrentan a la hora de prepararse con solo meses de anticipación para uno de los certámenes más complejos del mundo. Deberán presentar esculturas gigantes y distintos postres, que llevarán las historias del Oeste para mostrar una cara nueva del país.
En el mundo existen varios campeonatos vinculados a la pastelería y el helado artesanal. San Juan tiene uno de los pocos argentinos que ya participó en cuatro de estos, como referente del helado artesanal. Se trata de Santiago Nieto, quien es el encargado de los sabores de Portho Gelatto.
“Existen varios campeonatos a nivel internacional y en este es la primera vez que invitan a una Selección argentina, así que tuvimos que conformar el equipo”, contó. Participan 12 equipos, la mayoría europeos, y Argentina debuta gracias a su trayectoria.
El capitán dijo que buscarán ser competitivos, pero sobre todo mostrar a Argentina como un país donde las capacidades van creciendo. En este marco, también decidió lucir otro lado del país en la copa internacional. “Se elige un tema general para la competencia que es común para todos los equipos. Este año tiene que ver con la naturaleza del país”, contó. El sanjuanino propuso “el vuelo y la huella de la naturaleza, referido a los guardianes de la cordillera”, contó. No es la primera vez que Nieto lleva el Oeste a instancias internacionales: otras veces compitió con helados de membrillo, jarilla, vinos sanjuaninos. Ahora, con su flamante equipo, repetirá esta fórmula que tuvo buenos resultados.
La clasificación se conoció en mayo, contó el flamante capitán, por lo que están avanzando a toda velocidad. “Es un proyecto a largo plazo, porque son instancias muy competitivas”, contó Santiago. En esta primera competencia deben armar una mesa que incluye copa helada, dos esculturas entre 1,2 y 1,8 metros de chocolate y caramelo, una torta y dos tipos de bombones. “La evaluación es rigurosa, porque por ejemplo los bombones se hacen uno para cada juez y se pesan, cualquier diferencia de gramos baja puntos”, contó. Todo eso se hace desde cero en el lugar y cuentan con 7 horas y media de tiempo para preparar lo que serán obras de arte comestibles. El entrenamiento del equipo es diario, porque primero deben lograr que los sabores, colores y texturas sean ideales y después reducir los tiempos. En total hay tres personas haciendo las preparaciones y el capitán, que debe ser el motor antes y durante la competencia.
Santiago cuenta ya con dos participantes aseguradas, que son pasteleras que viven en este momento en Buenos Aires. Además de armar el equipo y trabajar durante la preparación, parte de su rol es conseguir un espacio y los elementos para hacer cada pieza. “Pedimos la moldería a Italia, hay que conseguir maquinaria para practicar, porque mucho tiene que ver con la tecnología que se usa”, contó. También logró algunas capacitaciones en Europa para el equipo, para que aumentar la capacidad competitiva, frente a seleccionados que llevan “dos años o más preparándose para la copa”. Además de buscar sponsors, el sanjuanino vendió su propio auto para invertir en el proyecto. “Son más o menos 190.000 euros lo que cuesta participar, pero justamente es mi experiencia como empresario otro plus por el que me eligieron, porque sé de gestiones”, dijo.
/DC